El Partido Comunista de los Trabajadores de España (PCTE) quiere denunciar públicamente la grave situación que padece la plantilla de la oficina de Correos en Torrelavega, dos meses después del desprendimiento parcial de una pared y del techo del edificio, un suceso que puso en evidencia la precariedad de las instalaciones y la negligencia institucional hacia los derechos laborales y la seguridad del personal.
Este hecho no es una anécdota ni un accidente fortuito, sino la consecuencia directa de años de abandono y desinversión en los servicios públicos, especialmente en un sector estratégico como el postal. Lo sucedido en Torrelavega refleja el desprecio estructural de los gobiernos —del PSOE y del PP por igual— hacia las condiciones laborales de la clase trabajadora, a la que exigen sacrificios mientras mantienen infraestructuras en estado ruinoso.
La dirección de Correos, con el aval del Gobierno central, es responsable directa de permitir que las trabajadoras y trabajadores sigan prestando servicio en un espacio que pone en riesgo su integridad física. A esto, se suma la habitual falta de transparencia y comunicación con la plantilla, que no ha recibido garantías claras sobre la seguridad de las instalaciones ni información detallada sobre los informes técnicos.
Exigimos:
- El cierre inmediato de las zonas afectadas hasta que se certifique, por medios independientes, que no existe riesgo para la salud y seguridad de la plantilla.
- La reubicación temporal del personal en espacios seguros, sin merma de derechos ni condiciones.
- La depuración de responsabilidades en la dirección de Correos y en los organismos públicos implicados.
- Un plan urgente de inversión en la red de oficinas de Correos de Cantabria, y especialmente en Torrelavega, que asegure condiciones laborales dignas y seguras.
La clase trabajadora no puede seguir pagando las consecuencias de una gestión orientada al beneficio empresarial y al recorte sistemático de lo público. La situación en Torrelavega es un símbolo de una política que considera a los trabajadores prescindibles, y al servicio postal, un negocio más que una obligación pública.
Desde el PCTE nos solidarizamos con la plantilla de Correos en Torrelavega y llamamos a la denuncia activa de esta situación. Solo con organización, presión y lucha podremos revertir el deterioro del servicio postal y mejorar las condiciones laborales y materiales dignas para quienes lo sostienen. Solo con la organización y la movilización de la clase trabajadora alcanzaremos una sociedad socialista-comunista en la que la protección de nuestra salud en nuestros puestos de trabajo se atienda realmente.