A mediados de marzo, el Consejero de Educación de Cantabria informaba a trabajadores, alumnado y familias del CEIP El Pedregal de Castro Urdiales del cierre definitivo del colegio al finalizar este curso. No es el primer ataque que enfrentaba esta comunidad educativa, ya que hace 3 años se intentaron frenar las nuevas matriculaciones en el colegio, encontrándose ya con una férrea y decidida respuesta y por parte de docentes y familias.
¿Qué está pasando?
¿Cuál puede ser el motivo para cerrar un colegio público cuya matriculación ha aumentado en los últimos años y que se sitúa en una zona en la que hay un repunte de la natalidad?
Para sorpresa de nadie, los intereses privados de los capitalistas se encuentran detrás de esta decisión. El edificio en el que se desarrolla la actividad de este colegio es propiedad de una fundación privada que pretende no renovar el contrato de arrendamiento que tiene con la Consejería. Los dueños de este edificio tienen claros sus intereses de clase, y buscan sacar un mayor rédito económico del edificio, que ya se comenta que podría utilizarse para cursos de verano o para hacer un bachiller privado.
Por su lado, la Consejería de Educación, como siempre ocurre con los gestores del capitalismo, no es un actor imparcial en este atropello a la educación pública, ya que pretende beneficiar los intereses de rentistas y de la educación privada en Castro Urdiales. La consejería no ha dado ninguna opción al colegio a utilizar otro edificio para mantener su actividad, y simplemente ha decretado el cierre y el reparto de los más de 80 alumnos entre el resto de los colegios públicos de la ciudad, mientras que algunos de los trabajadores serán reubicados
Transformar la rabia en respuesta
La respuesta de las familias, los trabajadores y los alumnos del CEIP El Pedregal ha sido transformar su rabia ante esta injusticia en una respuesta firme, comprometida y organizada. Han denunciado el papel de los intereses privados de la consejería y la fundación y han buscado el apoyo de la ciudad de Castro Urdiales y de toda la comunidad educativa y la clase obrera de Cantabria que lucha por defender la educación pública. Para ellos, El Pedregal es más que un colegio, y así lo han hecho saber a través de las más de 8000 firmas recogidas, las diversas concentraciones en Castro Urdiales y Santander y el intenso trabajo en redes sociales y en los medios de comunicación. Desde aquí aplaudimos el espíritu de lucha y combate demostrado por los integrantes de este colegio.
¿Qué proponemos los comunistas?
Los CJC y el PCTE hemos apoyado y difundido la lucha contra el cierre de El Pedregal, ante lo que es otra prueba clara del sometimiento de la educación pública a los intereses de unos pocos y al fomento de la educación privada y concertada como un nicho de mercado a explotar dentro del capitalismo. La solución que proponemos y exigimos los comunistas es la expropiación sin indemnización del edificio y garantizar el mantenimiento de su alumnado y sus trabajadores. Esta es la única medida enfocada a conseguir en el futuro una educación y una sociedad para la clase obrera, que no esté sometida a los intereses privados.
¡El Pedregal para la clase obrera!
¡No al cierre del CEIP El Pedregal!
¡Por una educación para la clase obrera!