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cantabria24horas entrevista a Astor Garcia

Ástor García (Oviedo, 1978) es un docente asturiano que reside en León. Además, es el secretario general y candidato a la presidencia del gobierno del Partido Comunista de los Trabajadores de España (PCTE).

-Muchas gracias por atender nuestras preguntas, sabemos que en las campañas electorales os faltan horas y se agradece el esfuerzo. Para comenzar, ¿cuáles crees que son los principales problemas a los que se enfrenta España en este momento?

Ahora mismo, hay dos niveles: lo que parece que son los problemas esenciales y luego están los problemas reales que vive la clase trabajadora. Si tú atiendes a la campaña electoral parece que los tiros van por un lado, favoreciendo a los partidos que se presentan, pero la realidad es la hemos visto esta mañana por ejemplo en Santander, donde sigue habiendo gente que pierde la casa; sigue habiendo desahucios; seguimos teniendo un problema con la inflación que hace que sea mucho más complicado cubrir las necesidades básicas de los trabajadores… En definitiva, hay un sector muy importante de la mayoría trabajadora que sigue en una muy mala situación ya tres años después de que estallara la crisis desde lo del Covid.

Si uno se para a pensar cómo era su estado al principio de esta legislatura y cómo lo es ahora, objetivamente, la situacion de los trabajadores españoles y sus condiciones de vida no han mejorado. Las cosas han ido a peor, eso es así.

-¿Y en Cantabria?

Lo que tiene este período en el que vivimos se igualan los problemas a los que se enfrenta un trabajador cántabro y uno gaditano, por ejemplo. Nosotros planteamos un programa que sirve en todos los lugares, porque no se basa en un análisis de lo concreto de cada ciudad o comunidad, sino que atiende los problemas globales y plantea una respuesta directa que no tiene que ver necesariamente con la representación parlamentaria, sino que afecta a qué se debe priorizar en el próximo período legislativo.

 

-Hablando precisamente de eso, ¿cuáles son las expectativas del PCTE de cara a estos comicios? Al fin y al cabo, no hay ninguna encuesta que les den representación, hecho que usan desde sectores socialdemócratas para cargar contra vosotros por “acercar a Vox al gobierno” y apelan al voto útil.

Nosotros cuando nos presentamos a las elecciones no nos presentamos para ser atrezo. Entendemos que tenemos dificultades añadidas a las de los partidos mayoritarios: necesitamos avales para poder presentar candidaturas, nos cuesta mucho más acceder a los medios de comunicación para poder explicar nuestras propuestas… evidentemente las posibilidades que tenemos de sacar representación no son muy altas.

Pero me has planteado un tema muy interesante, el del voto útil. Si uno se sitúa únicamente en la política parlamentaria, pues evidentemente, todo aquel partido que no saca representación se puede entender que es un voto que no vale. Pero es una falacia. Es un argumento que hacen los partidos grandes, los que tienen más opciones de obtener representación.

La verdadera pregunta es ¿cuál es la utilidad del voto? Lo importante es realmente qué es el voto útil. ¿Es voto útil votar al PSOE de la Ley Mordaza o a Sumar que no ha derogado la Reforma Laboral? Útil es lo que sirve para reforzar a los trabajadores y trabajadoras en su día a día y no sólo el 23 de julio.

-¿Es el PCE un partido comunista?

En primer lugar quiero dejar clara una cosa, nuestro partido es el único que se presenta en estos comicios abiertamente como comunista. A mí no me gusta meterme en otros partidos ni hurgar en las heridas, pero está claro que el PCE lleva unos años de claro despiste. Plantearon como un gran éxito entrar en el Gobierno de la mano de Unidas Podemos, pero entraron en el Gobierno de Coalición para ser la muleta del PSOE.

Esa situación les ha llevado a aceptar la pertenencia de España en la OTAN, aceptar la posición del PSOE con el Sáhara y las relaciones con Marruecos, no derogar la Reforma Laboral y acabar pactándola con Ciudadanos y el visto bueno de la CEOE, los ERTEs… ¡los ERTE! Que han pasado en unos años de ser la bestia negra contra la que pelear desde los sindicatos a un motivo de gran orgullo y habrá que preguntarse por qué.

-La política griega ha sido considerada en las últimas décadas como la bola mágica donde vemos el futuro de España. La irrupción de Syriza-Podemos, el auge de la extrema derecha Amanecer Dorado-Vox… ¿Crees que llegará a España el auge de un partido marxista-leninista como está pasando en Grecia con el KKE?

No me cabe duda. Más pronto que tarde va a suceder. La peculiaridad de Grecia es que el Partido Comunista de Grecia, en los años 90 y tras la caída de la URSS, cuando otros partidos comunistas se dedicaron a renunciar a sus principios y abrazaron otros tipos de ideologías, ellos resistieron. Por lo tanto, ellos no tuvieron ninguna situación en la que el Partido desapareciera y se vieran forzados a refundarse.

Eso se ve que ellos han estado en todos los grandes episodios importantes de la historia de la Grecia contemporánea: han luchado contra la invasión nazi, contra la dictadura, organizó el Levantamiento de la Politécnica. Ellos tienen la continuidad que aquí se ha perdido. Por eso, a pesar de que nosotros queramos la reaparición de un partido comunista fuerte las condiciones no son nada fáciles, nosotros tenemos que reconstruirlo.

-Y ahora que entramos en el plano internacional, ¿cuál es bajo su punto de vista la situación del comunismo internacional? Porque podríamos decir que en la actualidad la primera potencia económica mundial, China, está gobernada por el autodenominado Partido Comunista de China, pero sería hacernos trampas al solitario.

Sería hacerse muchas trampas. Creo que es importante distinguir entre el movimiento comunista y los partidos que se autodenominan comunistas. No es ningún secreto que el movimiento comunista está en crisis tras los 90 y no está dando respuestas a los problemas que ahora tiene la clase trabajadora. Ahora cuesta mucho más desarrollar una política revolucionaria, además, se genera situaciones, como las que comentabas, que generan confusión entre los trabajadores y con las que cuesta mucho más desarrollar políticas comunistas. Tenemos que remarcar que nuestra propuesta no es una propuesta capitalista, pero tampoco es la de China, que no es más que una potencia capitalista aunque se vistan de socialistas.

Esta crisis de la que hablo se supera reforzando los partidos comunistas en cada país. Además, es importante lazos que recuperen los lazos entre ellos y encuentren su lugar en los sindicatos de clase.

-Volviendo a España, ¿cuáles son las primeras medidas que tomaríais en caso de estar en el Gobierno del Estado en un medio o corto plazo?

Nuestra propuesta no es un la de una promesa electoral al uso. Nosotros lo que proponemos es un programa de lucha partiendo de la base de que gane quien gane va a haber que luchar por los derechos de la mayoría. Porque hay una serie de mecanismos que ya están funcionando, que son compartidos por los diferentes partidos, que se resumen en lo que decía hace unos días la presidenta del BCE: “van a ser necesarias nuevas modificaciones estructurales, va a haber que hacer esas reformas”. Unas políticas que, en el caso de España y en el de otros partidos de la UE, nunca se han traducido en una mejora de las condiciones de vida de la clase trabajadora.

No estamos aquí para gestionar el capitalismo, pero está claro que hay una serie de políticas muy básicas que se deben acometer. Este ejemplo no será la primera vez que lo oigas, pero es que no tiene sentido que con 4 millones de viviendas haya gente sin casa. No tiene sentido que habiendo un sistema sanitario y un sistema educativo implantado en todo el Estado, las Administraciones se dedique a favorecer la entrada de capital privado en esos sectores. No tiene sentido, que teniendo unas comarcas con lo que hoy se conoce como soberanía energética como con el carbón, pero ahora dependemos más de la energía que viene de terceros países…

Nosotros creemos que en España debe haber un debate serio sobre la pertenencia de España en la UE, en la OTAN o que haya bases extranjeras en nuestro territorio y qué significa todo ello. En lugar de hacer promesas vacías, como están haciendo otros partidos, nosotros lo que buscamos es organizarnos para solucionar todos esos problemas de raíz.

-Muchas veces, desde sectores comunistas, se habla de que dentro del sistema capitalista actual apenas hay diferencia entre los partidos que se presentan a las elecciones y que no son más que meros gestores capitalistas. ¿Crees que habrá grandes diferencias para los trabajadores con un gobierno de Feijóo – Abascal que con uno de Sánchez – Díaz?

Mira, está muy bien eso que comentas porque me permite aclarar alguna cosa, gracias por la pregunta. Nosotros no igualamos absolutamente a todos los partidos, ya que hay formas más agresivas de otras en las que se gestiona el capitalismo. Por ejemplo, yo que vivo en la actualidad en Castilla y León, bajo el un gobierno de coalición entre PP y Vox, veo que hay diferencias y se dan retrocesos. Por ejemplo, una cosa muy básica, existe una gran agresividad contra las organizaciones sindicales o se fomentan una serie de elementos culturales de tipo reaccionario.

Si el PP y Vox llegan al gobierno, aquellas medidas que el Gobierno de entre PSOE y UP ha establecido y que, objetivamente, han aliviado temporalmente la situación de la clase trabajadora van a echarse atrás. Pero esos avances y retrocesos tienen que ver con als dinámicas no solo políticas, sino también económicas.

Un ejemplo muy interesante, es que esas medidas no son más que ayudas a las familias que en otros países han aplicado las derechas liberales, porque al fin y al cabo lo que se intentaba era mantener el sistema y que no ocurra un estallido social.

-Un tema que me apetecía comentar con usted, en los últimos años en España se ha visto un boom de ciertos partidos y organizaciones que mezclan elementos folclóricos del comunismo con discursos políticos muy cercanos al falangismo y al fascismo. Ejemplo de ellos son Frente Obrero o Vanguardia Española, ¿por qué crees que se produce este auge del rojipardismo que no se produce en los partidos comunistas? ¿por qué crees que medios de comunicación generalistas dan espacio a gente como Roberto Vaquero o Santiago Armesilla y no a líderes comunistas como usted?

Yo creo que la explicación no es solo la debemos ver bajo el prisma de España. En España se concreta en algunos partidos como tú dices, pero que obedece a una situación más general. Nosotros analizamos que estamos viviendo unos tiempos en los que hay una reacción antiglobalista en el Occidente capitalista. Hay unos sectores capitalistas que no se han visto beneficiados por la globalización y que reaccionan frente ello atacándola por la vía económica, pero también por la política y cultural.

El paradigma de esta situación se ejemplifica en lo que llamamos el trumpismo, pero que tiene ecos en otros países y tiene ecos en organizaciones que se reivindican de izquierdas o que representan a la clase obrera. Hablan mucho de la necesidad de tener estado fuerte, del estatismo, tener un estado fuerte que sea capaz de competir con otros estados capitalistas.

Tienen un planteamiento que, frente a esa ideología que se resume en eso que denominan “wokismo”, pretender volver a los modelos tradicionales de familia, de hombre-mujer, etc.

Qué es lo que pasa, que eso, cuando se traduce políticamente, cuando eso lo plantean desde punto de vista de clase, lo que sale es lo que ya conocemos. Vemos un tercerposicionismo que no es nuevo, que siempre ha existido, desde los años 30, esa mezcla de elementos del marxismo con elementos provenientes del fascismo.

Entonces, qué ocurre, que estas organizaciones, que provienen de distintos sitios, y por eso unas inciden mucho en la “recuperación del pasado imperial” mientras que otras inciden en el “rechazo a la inmigración” básicamente. Simplemente son organizaciones que se están aprovechando de la actual ola reaccionaria que vivimos.

Ahora el debate es, si tu ves que la clase trabajadora está siendo atraída por la extrema derecha, ¿cuál es tu papel, aprovechar los elementos de la ultraderecha o utilizar argumentos vinculados a situación de la clase? Y ahí hay gente que ha optado por utilizar los elementos de la derecha en sus distintas versiones.

Nosotros somos conscientes de que existe esa ola reaccionaria, pero nosotros nunca intentaremos pescar en ese río revuelto en una clave tan peligrosa, ya que sus planteamientos siempre van dirigidos a enfrentar al último con el anteúltimo. Están haciendo un flaco favor a la mayoría trabajadora, pues la cuestión no es luchar entre nosotros por las migajas, sino luchar unidos contra el explotador.

-Creo que has sido muy educado con ellos. Bajo mi punto de vista, son organizaciones que calan entre la gente más despolitizada porque transforman su miedo en odio al diferente.

Sí sí. A mí un elemento que me llama mucho la atención, por ejemplo, del Frente Obrero es que ¿a quién hacen escraches? A Irene Montero, por ejemplo, jamás les verás hacérselos a Vox, y mira que lo merecen. Lo que están haciendo esta campaña es realmente salvaje, es el planteamiento este político de barra de bar, de “sujétame el cubata”, pero creyendo que hacer eso es hacer política valiente. Como diciendo: “nosotros somos los únicos que decimos las cosas”, cuando la realidad es que lo que dicen son burradas.

-Y terminamos con este espacio que en los debates les gusta llamar el minuto de oro, ya que no te han invitado al Debate a 3, ¿por qué hay que votar al PCTE?

Creo que es importante votar al PCTE para romper con la dinámica del mal menor. El voto al PCTE no se va traducir necesariamente en representación parlamentaria, sino que se va a traducir en una mayor fuerza de las organizaciones obreras y populares toda la próxima legislatura y las siguientes.

Nosotros pedimos a los trabajadores y trabajadoras es que compartan con nosotros una serie de ejes de lucha y confrontación para el próximo período y que, sobre todo, tengan clara una cosa de cara a lo que pase el próximo domingo. Y es que, las elecciones pasan, pero el Partido Comunista de los Trabajadores de España permanece.