Skip to main content

Introducción

Ante las graves resoluciones aprobadas por la Asamblea de Madrid y el Ayuntamiento, una sobre ilegalización de partidos “separatistas” y, la otra, para establecer la celebración del Día Mundial de las Víctimas del Estalinismo en la capital, los ataques más recientes al monumento a las Brigadas Internacionales de Ciudad Universitaria o la estatua de Dolores Ibárruri “Pasionaria” en Rivas, las agresiones a menores internos en el centro de Hortaleza, ataques racistas en el Metro, Cercanías o autobuses y la retirada de las placas que homenajeaban en el cementerio de La Almudena a los fusilados por el fascismo, lanzamos nuevamente la consigna del ¡No Pasarán!

Ninguno de los elementos anteriores son hechos aislados, al margen unos de otros, sino que todos ellos son consecuencia de la tendencia natural del imperialismo, fase superior del capitalismo, a la reacción en todos los ámbitos. Los grandes monopolios salieron de la crisis que estallara en 2007 a costa de una mayor explotación de la clase obrera y, aunque hubo un cierto nivel de contestación social y movilización obrera y popular, esta fue insuficiente para evitar que descargasen sobre nosotros su recuperación económica.

A las puertas de una nueva crisis económica, en la que la patronal tratará de seguir el mismo esquema para mantener su tasa de ganancia, arrasando si no lo impedimos con nuestras condiciones de vida y trabajo, han desencadenado una batalla ideológica de gran magnitud para desarmar políticamente a la clase obrera, tratando de debilitarnos como clase y así lograr más fácilmente seguir imponiendo su ley en la lucha de clases.

Resolución anticomunista en el Ayuntamiento de Madrid

Uno de los ejes de estos ataques el anticomunismo, la revisión histórica de lo que fue la construcción del socialismo en la URSS y otros países del este de Europa y la equiparación con el nazifascismo bajo el paraguas del totalitarismo. La Unión Europea desde sus orígenes ha adoptado el anticomunismo como ideología oficial, intensificándose los ataques tras el triunfo de la contrarrevolución.

Esta posición de la UE ha ido acompañada de la prohibición de nuestros símbolos, eliminación de monumentos, ilegalización de partidos y persecución de militantes comunistas en países como Letonia, Lituania, República Checa, Rumanía, Polonia o Hungría y fuera de la UE, en países europeos como Moldavia y Ucrania.

La última vuelta de tuerca en esta pretensión de perseguir nuestras posiciones revolucionarias tuvo lugar el 19 de septiembre de este año, en el que se aprobó en el Parlamento Europeo la resolución “Importancia de la memoria histórica en el futuro de Europa” en la que caracterizando la construcción del socialismo en Europa durante el S.XX como estalinismo promueven la declaración en todos los estados miembro el 23 de agosto como día de las víctimas del estalinismo y del nazismo, reconocer y divulgar los crímenes cometidos por estas ideologías por el futuro de Europa y condenar la propaganda y manifestación de estas ideologías. Esta resolución fue aprobada por los europarlamentarios del PP, Ciudadanos, PNV, PSOE y ERC, con la abstención de VOX, entendemos que por falta de contundencia en la lucha contra el comunismo o por su defensa más o menos explícita, según el contexto o el dirigente, del fascismo.

En Madrid es VOX quien recoge el guante, a pesar de su abstención en el Parlamento Europeo. El grupo municipal de VOX propuso una resolución al pleno del Ayuntamiento de Madrid que fue aprobada con el apoyo de Ciudadanos y PP. En ella, además de toda la exposición de motivos basada en el revisionismo histórico y la propaganda anticomunista, establece que:

  • El 23 de agosto será celebrará en Madrid el Día Europeo Conmemorativo de las Víctimas del Estalinismo y el Nazismo
  • Celebración del 10 de mayo en honor de Ángel Sanz Briz, primero voluntario en el Ejército sublevado durante la Guerra Nacional-Revolucionaria y posteriormente diplomático de la España fascista hasta su jubilación, por su papel en la salvación de judíos sefardíes en Hungría.
  • Crear un mapa de checas y cárceles de Madrid durante la Guerra Nacional-Revolucionaria y la posguerra.
  • Prohibir el destino de fondos o la cesión de espacios que “ensalcen o justifiquen regímenes totalitarios comunista, marxista, estalinista y nacionalista o promuevan el racismo, la xenofobia y otros tipos de intolerancia

Las enmiendas de Ciudadanos y Partido Popular fueron para incluir el rechazo al racismo, la xenofobia y otros tipos de intolerancia, con vistas a facilitar la explicación de su posición a más amplias masas y esquivar los posibles ataques desde el resto de partidos por posicionarse con VOX. Denunciamos el papel de Más Madrid y el PSOE. Más Madrid pese a votar contra la resolución globalmente, sí dio su aprobación parcial a la misma con sus votos favorables a celebrar los homenajes a la persona de Ángel Sanz Briz, mientras que el PSOE rechaza en Madrid la posición anticomunista que sí aprueba en el Parlamento Europeo, en un ejercicio de oportunismo político.

Denunciamos que detrás de esta resolución está la intención real de prohibir la difusión de nuestro programa político para la liberación de la humanidad, con la vista puesta en la ilegalización del Partido Comunista, de acuerdo con la política oficial de la UE. El Partido Comunista en España se acerca a su centenario en 2020 y ha sido ilegal durante buena parte de su historia, por lo que no minusvaloramos estas amenazas, a sabiendas de que todos los partidos capitalistas pueden ponerse de acuerdo, como ya han hecho en Europa, para acabar con nuestra situación de legalidad. No vamos a renunciar a nuestra lucha política cualesquiera sean las condiciones en las que debamos luchar. Solo nuestro trabajo organizado entre la clase obrera y el pueblo, el fortalecimiento de las organizaciones populares y sindicales y el papel dirigente de los cuadros comunistas en su seno son nuestra garantía de enfrentar la represión en cualquier grado.

En cualquier caso, si en base a esta resolución del Ayuntamiento de Madrid se trata de recortar derechos que como partido legalmente constituido disponemos, como denegación de espacios para la celebración de actos o autorización de concentraciones y manifestaciones en la vía pública, defenderemos nuestro trabajo por todos los medios a nuestro alcance.

El día 23 de agosto nos reservamos el derecho a expresar con toda la contundencia que requiere la equiparación del socialismo-comunismo con el fascismo, señalando directamente a todos los partidos capitalistas que por acción u omisión están permitiendo el avance de posicionamientos reaccionarios entre nuestra clase. Rechazamos a su vez que ni un solo día del calendario sirva de homenaje para fascista alguno. A pesar de la salvación de judíos en la Hungría aliada del nazifasismo, primero, ocupada militarmente por Alemania en 1944, después, Ángel Sanz Briz debe ser condenado como un destacado cuadro diplomático de la dictadura en España y, por tanto, recordado por la historia por formar en las filas del enemigo de clase. No solo rechazamos que el 10 de mayo se le homenajee, sino que exigimos que se le retire la Medalla de Oro de la ciudad de Madrid, concedida por el Gobierno de Ahora Madrid, se elimine la Avenida homónima que bautiza una calle del distrito Latina y la placa homenaje en su casa de la Calle Velázquez, por respeto a las víctimas del fascismo en España y el resto del mundo.

Este es el respeto que exigimos para los luchadores fusilados en La Almudena a quienes por el contrario el Ayuntamiento pretende negarles la memoria mediante la eliminación de las placas que les rendían homenaje. Rescatar la memoria histórica de la Guerra Nacional-Revolucionaria, de la salvaje represión fascista y de la lucha en todas las condiciones durante la dictadura se hace imprescindible como arma ideológica contra el revisionismo histórico, no para hacer un ejercicio de nostalgia, sino para dar la batalla en el presente. Las insuficientes medidas recogidas en la actual Ley de Memoria Histórica o las tibias iniciativas del gobierno de Ahora Madrid que se intercalaban con otras concesiones en la materia como el homenaje a la contrarrevolución húngara o la más arriba mencionada medalla de oro a un fascista, no bastan para recuperar nuestra memoria histórica.

Ilegalización de partidos separatistas

En la Asamblea de Madrid se avanzaba por la misma senda reaccionaria, con los mismos actores, aunque poniendo el foco en los partidos independentistas. Nuevamente a propuesta de VOX y el apoyo de Ciudadanos y el PP se aprobó en plena campaña electoral, el 7 de noviembre, una resolución pidiendo la ilegalización de “los partidos separatistas que atenten contra la unidad de la nación con los instrumentos legales a su alcance o procediendo a las reformas legales que habiliten a ello.” Días antes el concejal por Madrid y dirigente de VOX Ortega Smith había formulado esta amenaza en un debate electoral.

Esta propuesta para la ilegalización de una determinada posición política no es nueva, la novedad estriba en que hasta ahora se había esgrimido con la justificación de la existencia de violencia vinculada a dicha posición. Con anterioridad se criminalizaban las formas, apuntando esta PNL directamente a la defensa de posiciones independentistas. El giro reaccionario que estamos viviendo se expresa de muchas formas y esta es una más de ella. Cuando rechazamos la sentencia del procès no lo hacíamos por ninguna afinidad ideológica con líderes políticos con quienes no tenemos afinidad alguna y que deberían responder por sus años de gobierno contra el pueblo trabajador, sino porque esa sentencia se da en un contexto de aumento generalizado de la represión, porque los delitos inculpados y los argumentos esgrimidos en este proceso, se dirigirán mañana contra los líderes del movimiento obrero y sindical y contra los comunistas.

Rechazamos las posiciones nacionalistas que anteponen la cuestión nacional sobre el componente de clase, porque debilitan al conjunto de la clase obrera de España frente a los monopolios de aquí y de fuera que nos explotan por igual en Madrid, Barcelona o Bilbao, al margen del sentir nacional de unos y otros. Consideramos un error que desde organizaciones del movimiento obrero y popular se contribuya a reforzar posiciones que encadenan a la clase obrera a una fracción u otra de la burguesía y defendemos la independencia política de nuestra clase. Ante esta situación, condenamos una PNL que tiene el objetivo de seguir exaltando el nacionalismo español, enfrentándonos con el pueblo trabajador de Cataluña, allanando el camino para el nuevo recorte de derechos y libertades que supondría hoy la ilegalización de partidos políticos por la simple defensa de posiciones independentistas.

Contra la mujer trabajadora y los trabajadores inmigrantes

Los ataques se están intensificando también en esta dirección. La provocación de VOX en un minuto de silencio a las puertas del Ayuntamiento de Madrid ante una concentración de repulsa por una mujer asesinada durante el verano, fue la antesala de toda una serie de ataques que pretenden justificar la inexistencia de opresión hacia la mujer trabajadora. La provocación desatada nuevamente por el dirigente de VOX, Ortega Smith, el Día Internacional contra la Violencia Machista fue la culminación de unas semanas en las que desde VOX se había atacado el derecho al aborto, hablando de “19.000 condenados a muerte” en boca de su portavoz Rocío Monasterio y con unas estadísticas falsas sobre abortos en la Comunidad. También se atacó duramente la lucha de las mujeres y la educación en igualdad en los centros educativos.

Por otro lado, los ataques de VOX a la inmigración se han dirigido en los últimos meses con especial ahínco a los menores migrantes, muchos de los cuáles sobreviven hacinados en centros sin recursos de nuestra región, como el de Hortaleza.  Como sucede en estos casos, el fascismo organizado, en este caso el Hogar Social Madrid, toma el testigo de este discurso racista para planificar una campaña contra este colectivo de menores inmigrantes, llegando a convocar una concentración a las puertas del centro, con la colaboración de los medios que se hicieron eco de la misma como convocada por la marca blanca del HSM, “Hortaleza Se Defiende”. El último ataque con un artefacto explosivo detonado controladamente por los Tedax, eleva el nivel de violencia contra el colectivo, sin que haya habido acusaciones de terrorismo, campaña mediática, ni detención alguna, procedimientos que sí se dan en situaciones de otra índole, sin utilización de arma o explosivos

Este discurso que enarbola hoy VOX tampoco es nuevo, sino que en gran parte ha sido defendido siempre por el PP, por Ciudadanos y en parte por el PSOE, pero encuentra hoy más caldo de cultivo donde las consecuencias de la crisis son más severas, un discurso que enfrenta a unos trabajadores con otros en función de su origen, debilitándonos como clase y fortaleciendo a nuestros explotadores. Las agresiones racistas y xenófobas son tristemente habituales y este discurso puede dar lugar a un aumento de las mismas.

Cerremos las puertas a la reacción

Como ya señalásemos tras la irrupción de VOX en las elecciones andaluzas, no serán un Frente Democrático o un Frente Antifascista quienes detengan el avance de la reacción. No serán sus juegos parlamentarios de debates acalorados, declaraciones altisonantes o resoluciones firmas las herramientas que debemos utilizar para detener el giro reaccionario. El escenario de un posible gobierno de coalición entre la nueva y la vieja socialdemocracia puede ser el aldabonazo definitivo para estas posiciones reaccionarias ante las concesiones que un gobierno “de izquierdas y progresistas” vaya a hacer a los monopolios, gobernando en contra de la mayoría trabajadora.

Por eso llamamos a no depositar ninguna confianza en este posible nuevo gobierno, sino que debemos cerrar el paso a la reacción y a sus planteamientos con nuestras propias fuerzas, en los centros de trabajo, en los barrios obreros, luchando unidos al margen del país de origen de cada uno, con independencia del sentir nacional de cada cual, enfrentando las medidas antiobreras gobierne quien gobierne, en un proceso de acumulación de fuerzas que nos permita empezar a darle la vuelta a la situación actual.

Para esa tarea estamos construyendo Más Partido Comunista. No vamos a renunciar a nuestra historia ni a nuestro objetivo de hacer la Revolución Socialista en España, porque el único crimen del que podríamos ser acusados es renunciar a nuestra lucha por la emancipación de la clase obrera.

Madrid, 28 de diciembre de 2019

Comité Regional de Madrid

Partido Comunista de los Trabajadores de España

Acceder al documento en PDF